CALIGULA 2000

Bienaventurados los negros de espíritu, porque ellos resucitaran dos veces, (Evangelio apócrifo de San Judas Iscariote).
Pase caballero, señora, joven, señorita. Deténgase tan solo unos minutos ante este pequeño teatro de la calle, donde, a cambio de un poco de su tiempo, ustedes se van llevar lo mejor de mi espectáculo, la risa y la alegría que, como todos ustedes muy bien saben, es lo mejor que nos puede ofrecer la vida.


No me tenga miedo porque yo no me los voy a comer a ninguno de ustedes, y aunque en el publico presente hay varias señoritas que están para ser devoradas de un solo bocado, yo no voy a hacer eso, puesto que—como soy vegetariano—la carne me está prohibida; y, además, mi mujer es celosa, y es capaz de mandarme al hospital para que me hagan una soldadura de huesos.

Como todos ustedes podrán apreciar, ya nos hemos puesto este buzo ancho y brillante, y esta camisa que de tan florida, parece ser un jardín infantil. Mientras nos pintamos la cara para estar preparados y así iniciar nuestro trabajo, permítanme presentarme, puesto que quien les habla, es el gran payaso Caligula, internacionalmente conocido, por que con mi espectáculo he visitado, varios países como Viacha, El Alto, El Tejar, Munaypata y Achachicala; y quien acaba de regresar de una triunfal gira por países diversos como Vino Tinto, Achacachi, Tejada Alpacota y Tembladerani.

Y en esta oportunidad completamente gratis, les hará reír hasta que se orinen en los pantalones, por que como se dice vulgarmente, cuando yo estoy trabajando, “Caligula 2000” como me llaman, soy tan peligroso que me puedo violar a mi mismo.

…

A ver, en este lado, la personas inteligentes póngase a la rectura de mi mano derecha…Esto les había gustado , ¿no?, digo inteligentes y toditos forman fila…los que son educados pónganse a la línea que marca mi mano izquierda…!claro!, se les dice educados y rapidito hacen caso, pero les aseguro que si yo, en este instante les digo una mala palabra, estoy seguro que me pueden mandar al carajo, sean educados o no…

Así esta muy bien, ahora por este otro lado no vamos las personas superdotadas, es decir, todas aquellas personas que en menos de medio minuto puede hacer mil multiplicaciones metales, colóquense a rectura de mi mano derecha…¡claro!, todos son superdotados, pero si miramos su libretas escolares, esas libretas deben parecer almanaques de tanto feriado que tienen…y ya nomás, los demás se me están alineando en la línea que indica mi mano izquierda, por que si están esperando que les diga algo agradable están esperando en vano; por eso, todos los maricones agréguense a esta fila…¿vieron? Hay cualquier cantidad de maricones.

No, no, no, no vayan a pensar que los caballeros de este lado sean maricones , no, ellos no son maricones; antes eran, pero ahora ya no, es que, como hay tanta competencia…

Pero, no se vayan a preocupar, por que esto no leas va costar un solo centavo, es más, yo no necesito plata, si ustedes quieren yo le puedo regalar plata, si dinero es lo que me sobra.

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Como verán ya están listos mis instrumentos de trabajo, y hoy van a ver como voy a botar fuego de mi boca de hasta veinte metros de altura, mas alto no lo puedo hacer, por que no quiero que me suceda lo que me pasó en la ciudad de Santa Cruz, donde estuve la semana pasada trabajando, y cuando boté fuego a quinientos metros de altura, justo paso un avión volando, y se quemo su cola…

También me voy atravesar la orejas, los brazos, y el cuello, con esas agujas que están ahí, en el piso, y esto, como ustedes saben, es peligroso, y corriendo ese peligro lo voy a realizar, por que, como verán, esas agujas no están desinfectadas, y yo puedo enfermarme fácilmente.

Pero eso no es todo, por que sobre esos vidrios rotos que ven el piso, yo voy a caer de espaldas después de dar un triple salto mortal, y para que vean que no es broma lo que les digo, voy a invitar a dos caballeros del distinguido publico presente, para que estando yo de espaldas sobre los vidrios, se suban a mi pecho, y bailen malambo en mi encima.

Y para finalizar…con broche de oro mi espectáculo, esos tubos fluorescentes que ven ahí, me los voy a comer sin sal ni azúcar; y, después, voy a ensuciar focos de cien watts de potencia.

¿No me creen? Pues, les juro que lo que van a ver, y nuevamente guarden su plata, por que, como les dije yo no lea voy a cobrar un solo centavo. Tiene plata, quédate; ¿no tienes plata? También quédate, por que esto es gratis, puesto que a mi , el dinero es lo que me sobra.

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Bueno damas y caballeros. Ese caballerito da inicio a la función numero cien mil de su carrera profesional, y como todo artista que se respete, les pido gentilmente que me obsequien con el alimento que nos levanta la moral a los artistas, y eso tan sólo es un voto de aplausos…

Gracias, muchas gracias, aunque yo esperaba que los aplausos durasen por lo menos una media hora, pero no soy exigente. Por lo tanto, repitan esos aplausos, y háganlo con entusiasmo. Usted, joven, si usted, deje de hacer empanaditas con su chica y aplauda más que los demás; y ese joven que está metiendo la mano en un bolsillo que no le pertenece, mejor se pone a aplaudir, porque de lo contrario a chicotazo limpio le voy a enseñar a no tocar lo que no le pertenece.

Si, a usted le digo, porque en mi espectáculo lo único que se puede robar es el cariño del publico, así que, mucho cuidado, porque puedo llamar a un uniformado, aunque sea heladero, para que lo cargue como si fuera un bulto cualquiera…Mentira, ese joven es mi ayudante, y él sabe que si no se deja tratar mal, no hay sueldo.

...

Dando inicio a mi espectáculo, y a manera de calentar la garganta para después echar fuego de hasta veinte metros de altura—los que desconfían pueden medir la altura—, permítanme dedicarles un valsecito peruano. Ojo, a manera de entrenamiento, he dicho, porque para cantar solamente los mudos son las personas mas indicadas.

Riendo voy por la vida, tratando de ocultar mi pobre pena…


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(CALIGULA 2000 en VISCARRA, Victor Hugo, Ch’aquí fulero. Los Cuadernos Perdidos De Víctor Hugo Viscarra, La Paz, Bolivia: Correveidile™, paginas 50 - 58.)